De la Garrapata en la Webs
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Por: Nikolás Friedman
Si sumamos los ciudadanos muertos por enfermedades curables, abandono social (ancianos que han muerto de hambre), por toda forma de drogas, por el crimen organizado que ha elevado los índices de criminalidad sobre 300%, realizada por delincuentes comunes y por terroristas narco-fascistas (importados), etc., la cifra de asesinados, podría superar perfectamente los 40 mil a 50 mil ciudadanos al año, asesinados por el modelo neoliberal, por las instituciones terroristas de Estado (represivas), como la delincuencia común o lumpen proletario, que genera el modelo depredador.
Dicho esto, el señor Ricardo Lagos no es ajeno a eso, cuando uno lee sus artículos en sus periodos imberbes de 1962, “La concentración de capitales y el crecimiento empresario es una realidad que no se puede destruir con leyes, porque las grandes magnitudes de producción son una necesidad imperiosa de las economías modernas. (...) La única y verdadera solución es, entonces, la abolición de la propiedad privada sobre los medios de producción, los cuales deben pasar al Estado. En la medida que dicha propiedad subsista, todas las leyes que se dicten solo serán paliativos que jamás conseguirán la eliminación definitiva de las diversas formas de concentración” (Lagos, 1960: 172), eran sus momentos turbulentos, en su vida de “joven”. Cuando escribía llamando a destruir el Estado capitalista, para construir el socialismo, vociferando a los cuatro vientos, la abolición del Estado. Ahora, si comparan esa visión de ayer, con las de hoy, es la misma basura oportunista de siempre, que surge de la boca de Lagos, es decir, este sujeto siempre ha estado donde calienta el sol.
"Hace 20 años dije que o la democracia es capaz de
enfrentar a este poder económico que surge dentro de ella al amparo de la
libertad, o desaparece absorbida por dicho poder, que detentan unos pocos y que
la colocan al servicio de sus particulares intereses. (...) Hoy, por
desgracia el dilema es el opuesto: ¿Será posible, sin tocar esa fuerte
concentración del poder económico que ha desarrollado esta nueva burguesía
financiera, construir una sociedad democrática? Si ello es así, esta nueva
burguesía entenderá que su subsistencia está ligada a un sistema autoritario,
lo que le otorga una característica final: no acepta ni comparte los valores
democráticos que permitieron en el pasado convivir en un marco plural a
diferentes clases sociales".
(Para
los interesados, leer a un pequeño burgués, como Lagos)
http://www.scielo.org.ar/scielo.php?pid=S1851-37272010000100004&script=sci_arttext&tlng=en
En esos periodos históricos, de ayer era normal llamar
destruir al Estado capitalista, es más, era “revolucionario”, hoy es común ver
a esos pancistas defender ese mismo Estado opresor, ya que Lagos es de esos que
basan sus “valores y principios políticos”, en una concepción pequeña burguesa,
o la lógica de dominación del imperialismo fascista yankee, quienes unas
décadas atrás anunciaban la muerte de la historia (Francis Fukuyama, analista de
la CIA), pero la historia escrita por los pueblos dignos, están arrasados con
ellos, destruyendo el modelo neoliberal, neocolonialista salvaje, que Lagos
abraza con fuerza, abrazo oportunista, por cierto.
Ahora, con la caída de los países mal llamados socialistas, los Estados nacionales fueron anulados hasta sus cimientos, luego de una década muchos Estados fueron destruidos, divididos, arruinados, y aislados con las guerras asimétricas de cuarta generación, impulsada por los neoliberales solo para apoderarse de los recursos naturales de los pueblos y sus riquezas. Llegan a tal punto las repugnantes palabras de Lagos en su carta, que rabiosos defensores del neoliberalismo, como Escalona, salió cuestionándolo, pero no se engañen, Escalona, solo es otra basura neoliberal socialdemócrata, que usa las fraseologías para trepar socialmente, este miserable tiene las manos sucias y los bolsillos llenos de dólares con sangre, de cientos de chilenos, así como Ricardo Lagos, Bachelet, etc., y toda esa camarilla de convertidos al gran capital trasnacional e internacional.
Lagos, en su misiva, muy redundante, muy rebuscada, casi escrita en parábolas, muchas alegorías, metáforas, y figuras literarias, por cierto, para encubrir su pensamiento político de fondo. Ya que su carta hay que leerla con mucho pulcro, mirando la letra chica, fijándose en los detalles lingüísticos, que develan sus verdaderas intenciones solapadas o encubiertas, que lo único que busca es crear confusión política de principios en las masas.
Ahora que más trasparente que el libre albedrío (la democracia), y la soberanía popular, (el voto), tratando de entender su análisis casi vulgar como mediocre, lleno de matices encubiertos, uno ve en ellos una visión feudal, pseudo ética, tratando de citar solapadamente a pensadores burgueses (contrato social), cuando estamos hablando de libre albedrío, de soberanía popular o de una Carta Magna, porque tanto el libre albedrío y la soberanía popular son las características de una sociedad libre, es el ejercicio dialéctico de hombres libres y la constitución deben reflejar eso, en resumen, cuando los pueblos eligen y votan, realizan un ejercicio social, un acuerdo libre y soberano. Ese soberano son los pueblos, siendo precisamente los pueblos quienes le dan unidad política, legitimidad ética y moral, como de principios a una Carta Magna.
Una constitución jamás debe estar determina por las diferencias sociales en un país determinado, por el contrario, eso no es democracia y mucho menos podemos hablar de un marco común jurídico-orgánico-administrativo, es decir, una constitución que busca la igualdad de derechos y que resguarde la justicia social de los pueblos, lo contrario a eso es precisamente lo que la hace partisana (tiranía), y no su condición contradictoria, porque esas contradicciones buscan derechos versus privilegios de clase, como usted mañosamente trata de hacer pasar a esta nueva constitución, tratándola de partisana, y ya ve señor Lagos, esa “relativa estabilidad neoliberal”, de casi 5 décadas, que ustedes nos impusieron a sangre y fuego, de balas, fue puesta en jaque por millones de jóvenes, en cuestiones de días y le recuerdo que la historia es un proceso democrático ascendente, en eterna lucha y contradicciones de clase, que se repite una y otra vez como un ciclo dialéctico ascendente.
Usted señor Lagos no entiende de democracia, ni de constitución, usted solo vive de ella, el soberano es el único que manda, determina, cambia y rige, es decir, los pueblos y no una camarilla de corruptos y genocidas o “autoridades”, que a usted y su gente tanto les gusta mencionar, que no otra cosa que la eterna canción de guerra de la pequeña burguesía neoliberal parasitaria, a la cual usted pertenece que no otra cosa que “mesas de diálogos” o como quieran llamar a esa quimera. Lo que escribió luego de eso es agregado, barato, si gana él apruebo o el rechazo, y reitero es solo fraseología en liquidación para aparecer como conciliador, pero pútrido.
Haciendo un juego prosaico, por cierto tratando de confundir
al lector con ese juego de palabras, que de fondo está encubriendo algo claro,
usted, señor Lagos, que confunde o mezcla los derechos políticos, sociales,
culturales, económicos, etc., con los derechos cívicos, los derechos humanos,
la autodeterminación de los pueblos, el multilateralismo, la diplomacia. Ah,
por cierto, en la escena internacional, le estoy hablando de geopolítica,
estamos a las puertas de la muerte del unipolaridad (del imperialismo salvaje,
depredador, fascista), y ojo, la constitución de 1980 representa esa lógica de
DOMINACIÓN, una constitución al servicio del gran capital trasnacional y
el imperialismo fascista yankee, frente al multipolaridad de los pueblos
democráticos, populares. El apruebo podría implicar un cambio menor, por
cierto, pero es un paso más, para lograr la verdadera democracia en el país.
En Chile no existe una Asamblea Constituyente (como usted se refiere), para que hablar de una Asamblea Popular Constituyente con olor a trabajo, con olor a pueblos, el proceso en Chile fue de una Convencional Constitucional, que se eligió para elaborar una nueva constitución, nos guste o no su resultado, eso refleja que usted no está entendiendo los procesos sociales, será demencia senil o una descarada falacia, como una descarnada mentira más suya, para salvaguardar sus privilegios de clase, de parásito. Lo que significa que con la nueva constitución los poderes fácticos no podrán seguir transformándose en pilares de sustentación de modelo neoliberal pinochetista, es decir, el poder judicial, la fuerzas armadas, las fuerzas represivas y coercitivas, las iglesias, el parlamento, las leyes, su constitución fascista, los partidos políticos, el tribunal constitucional (quinto poder), las cárceles, el sistema económico, las estructuras financieras, etc., lo que significa una sola cosa, que hay que cambiarlo todo, radicalmente.
O el secuestro desde la embajada de Ecuador, tras una
operación de contra inteligencia organiza por el expresidente de Ecuador, Lenin
Moreno, con el MI6, y la CIA, para que Julian Assange sea extraditado a Estados
Unidos y arrojado a una celda hasta su muerte, solo por el hecho haber
denunciado las masacres cobardes de la soldadesca, fascista estadounidense en
Irak, es de decir, por ejercer el periodismo, lo que no ocurrió cuando usted y
toda esa gavilla de ladrones y asesinos ex concertacionistas rescataron desde
Londres, al ladrón, cobarde y asesino de Pinochet, que dice respecto a esto.
Ahora, su misiva, aparte de ser repugnante, lisonjera, como distorsionadora de la realidad, es vergonzosa su posición política frente al apruebo, y los pueblos, es más, debió haberse quedado en silencio, en el rincón nauseabundo del fascismo neoliberal de la ignominia, usted es parte de esa fracción de la oligarquía carnicera y corrupta, usted no tiene peso moral, ni ético para ser parte de nada, usted es un miserable yanacona de cuarta, es más usted es parte del genocidio neoliberal pinochetista.
De la editorial
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